miércoles, 20 de enero de 2010

No sin mi hija




Dirección: Brian Gilbert.
País: Estados Unidos.
Año: 1990.
Duración: 115 min.
Interpretación: Sally Field, Alfred Molina, Sheila Rosenthal, Roshan Seth, Georges Corraface, Mony Rey, Sarah Badel
Guión: Brian Gilbert & David Rintels (Autobiografía: Betty Mahmoody)
Productora: 20th Century Fox.
Música: Jerry Goldsmith.
Fotografía:
Jerry Goldsmith.

La película No sin mi hija está basada en la historia real de la estadounidense Betty Mahmoody, quien escribe un libro con la ayuda del escritor William Hoffer: Not without my daughter. En la novela, la autora y protagonista relata una experiencia autobiográfica vivida en 1984, al acceder ir a Irán en vacaciones para visitar a la familia de su marido Sayyed Bozorg 'Moody' Mahmoody, un médico afincado en EEUU de procedencia iraní. Tras prometer que estarían salvo y que solamente estarían dos semanas, una vez en Teherán comunica a su esposa que se quedarán a vivir allí.

La historia relata la experiencia que Betty Mahmoody vive en Irán durante dos años, cómo se le es arrebatada la libertad en nombre de la religión y en cómo su marido la retiene a ella y a su hija de cuatro años Mahtub, en el país, del cual finalmente consiguen escapar clandestinamente después de dos años, haciendo un horrible viaje atravesando las montañas de Irán hasta llegar a Turquía.

La historia transcurre en un momento de la historia en la que Irán, tras el derrocamiento del Sha en 1979, estaba gobernado por el Chií Ruhollah Jomeini, líder político-espiritual de la revolución, quién proclamó la República Islámica con un presidente electo cada cuatro años, reservándose a Jomeini la jefatura de estado siendo Líder Supremo de Irán. Instauró de nuevo la ley islámica o Shiva y fomentó las creencias radicales fundamentalistas islámicas. Además, en 1984 Irán llevaba cuatro años en guerra con Irak por cuestiones religiosas.



La historia de Betty Mahmoody muestra la pérdida de un aspecto fundamental en la vida de todo ser humano: la libertad, pero en concreto trata sobre la pérdida de libertad que sufren las mujeres a manos de los hombres, en este caso en los países islámicos. Donde el arrebatamiento de la libertad de las mujeres es amparado por la ley y más en un Irán gobernado por fundamentalismo islámico radical en todo su esplendor, a pesar de que la situación actual de la mujer no ha cambiado.


Aunque Betty es norte-americana, al estar casado con un iraní, al poner un pie en el país se convierte en ciudadana iraní y por ello debe ceñirse a sus leyes. Las mujeres iraníes, no pueden hacer nada sin el consentimiento de sus maridos, de los cuales sí que pueden divorciarse pero perderán todo el derecho sobre sus hijos.


Betty sufre un maltrato tanto físico como psicológico al recibir los golpes de su marido cuando contradice sus órdenes y al ser víctima de las amenazas de éste para coartarla y que cumpla su voluntad, relegándole todos sus derechos como persona.


El marido en un primer momento muestra un carácter afable y ningún signo de machismo hacia su mujer. Se preocupa de su hija y de su esposa a la que trata como a una igual. Pero una vez que entra en su mente la idea de ir a su país Irán, del que lleva alejado diez años, comienza a mentir a su mujer y a ocultarle sus verdaderas intenciones. Una vez que llega a Teherán y está rodeado de su familia, de su cultura y de su religión, se vuelve una persona completamente diferente que obliga a su mujer a seguir las costumbres y las leyes islámicas por la fuerza.


Muestra la influencia de una cultura, una sociedad y el fanatismo hacia una religión. Una persona que, a pesar de a ser iraní, ha vivido diez años de su vida en Norteamérica y ha llevado un estilo de vida occidental. Pero al llegar a su país de origen, adopta totalmente las costumbres y la cultura de sumisión de las mujeres, la cual impone a la suya propia y a su hija.

Una historia sobrecogedora, un retrato de la situación de las mujeres iraníes, que en el trascurso de los años, no ha mejorado. Quienes se encuentran en un callejón sin salida por las leyes de su cultura y su religión impuestas por los hombres que ejercen un machismo extremo sobre ellas y nadie hacemos nada por impedirlo.



Elisa Hernández Angulo.

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